viernes, 21 de febrero de 2014

Felipe Salas Arriola: periodista y escritor (1851-1892) (II)


      Pero a pesar de toda esta confraternidad, Felipe Salas utiliza “La Montaña” para defender posturas más extremistas que sus compañeros, por lo que muy pronto su pluma le llevará a verse varias veces ante los tribunales por injurias. El 1 de abril escribe un artículo contra el periódico “La República”, órgano del partido federal republicano, provocando la reacción de su director, Telesforo Ojea, que le exige explicaciones. A raíz de esta publicación, la relación de Felipe Salas Arriola con Luis Blanc, que tenía unos ideales más moderados, se enfría, desmarcándose del pensamiento de su amigo alcalaíno y desvinculándose del periódico “La Montaña” y de la vida política. “La República” se hace eco de esta polémica el 5 de abril:

     “Relacionada con un asunto enojoso, que por ser completamente ajeno á los intereses del partido y á las autoridades del mismo, no queríamos tratar, y no trataremos en lo sucesivo, en las columnas de LA REPÚBLICA, hemos recibido la siguiente carta:

     <<Sr. D. Telesforo Ojea, director de LA REPÚBLICA.

     Muy señor nuestro y distinguido amigo: Habiendo recibido de V. el encargo de solicitar en su nombre una retractación del suelto inserto en La Montaña del dia 1.º del actual, plana segunda, columna segunda, que comienza «De LA REPÚBLICA» y termina con las palabras «Ya ves si nosotros hablamos clarito y con franqueza,» que V. juzgó calumnioso para el periódico que tan dignamente dirige, fuimos al domicilio del fundador y director de aquella publicación, D. Luis Blanc, el cual nos ha manifestado, al repetirle el encargo de V., lo siguiente:

     Primero. Que desde el dia 16 del anterior mes de Marzo se ha separado de la dirección de este periódico, encargándose de la misma don Felipe Salas y Arriola, y es por lo tanto ajeno en absoluto, no sólo á la redacción del citado suelto, sino a su publicación, puesto que en la actualidad no toma parte directa ni indirectamente en las tareas periodísticas.

     Segundo. Como prueba de este aserto, el señor D. Luis Blanc nos mostró una carta, que reprodujo La Montaña el 28 del pasado, mes declarando que se retira de la política activa; añadiendo además verbalmente que la circunstancia de figurar su nombre en la cuarta plana como director, procedía de un descuido en la confección del mismo periódico, toda vez que había dado el oportuno parte de baja en las oficinas de la Administración económica. 

     Tercero. En corroboración de los extremos anteriores, hemos escuchado de labios de dos caballeros de la intimidad del Sr. Blanc las mismas afirmaciones que éste nos hizo referentes á su separación de cuanto se relacione con el propio periódico, agregando que no existen términos hábiles de que el Sr. Blanc rectifique un suelto del cual ni siquiera tenía conocimiento.

      Después de estas explicaciones, comprenderá usted la imposibilidad en que nos vemos de cumplir en todas sus partes la misión que V. nos había confiado.

     Con este motivo se repiten de V. afectísimos seguros servidores, Q. B. S. M., —Félix Gonzalez Llana. — Joaquin Vazquez».

Hoy 4 de Abril de 1884.» (10)

     Estas explicaciones no convencen al director de “La República”, quien opina que el escrito se debe a la pluma del que figura como director de “La Montaña”, Luis Blanc:

      “Véase ahora la contestación á la carta preinserta:

      <<Sres. D. Félix González Llana y D. Joaquin Vázquez.

     Muy señores míos y distinguidos amigos: Gracias mil por haber aceptado la comisión que encargué a Vds., y que con tanta caballerosidad y acierto han desempeñado.

      Seguramente no es de Vds. la culpa de que el Sr. Blanc no haya aceptado la responsabilidad de un suelto que siempre he creido, y sigo creyendo, que sólo él puede haber redactado, ó inspirado cuando menos. Al afirmar lo contrario, estimo que no ha obrado sinceramente con ustedes ni con los dos caballeros que con ustedes han conferenciado.

     Cuando he visto la noticia de que Blanc pensaba retirarse de la política activa, y á los pocos dias comenzó La Montaña á vomitar groseros insultos, comprendí que todo esto obedecía á plan preconcebido; no se me ocultó que era una de tantas habilidades como pone en juego el hombre que no tiene el valor de sus actos, para eludir una responsabilidad que sólo el caballero sabe arrostrar. Es un subterfugio para herir á mansalva. 

     Por lo demás, tengan Vds, la seguridad de que el Sr. Blanc es el autor de cuanto en La Montaña se dice. Voy á probar la inexactitud de cuanto afirma:

1.º Asegura que dejó de dirigir el citado periódico, y en la cuarta plana aparece como director.

2. ° En el negociado de la prensa del Gobierno civil se halla inscrito D. Luis Blanc como director; nada se habla del Salas Arriola.

      Ustedes saben, mis buenos amigos, que el responsable oficialmente de lo que se dice en un periódico es el que se halla inscrito en el registro gubernativo como director; más claro: el director es el que como tal se halla acreditado en las oficinas de la prensa.

      Después de esto, nadie puede dudar que el inspirador de ese periódico es el Sr. Blanc.  Por otra parte, sólo Blanc es capaz de escribir é inspirar la actitud de La Montaña.    Pero nadie tiene la culpa de que Blanc no tenga el valor de sus actos.  Yo siempre he creido que el escritor debe romper la pluma si no sabe escribir sin pantalla: el Sr. Blanc opina de distinto modo; peor para él.

      Por lo visto, no me queda más recurso que entenderme con Salas Arriola. Mañana lo llevaré ante los tribunales.  Repito á V. las gracias, y es siempre de V. afectísimo seguro servidor Q. B. S. M., —Telesforo Ojea. 

s/c Carbón, 9, tercero.»" (10)

     No sabemos si la amenaza de llevar a los tribunales a Felipe Salas se cumplió, pero lo que sí es seguro es que en septiembre se sigue una causa contra él por injurias al rey, aunque el juicio tiene que suspenderse por incomparecencia del acusado:

      “AUDIENCIA DE MADRID

      En la misma sección se ha suspendido el juicio oral de la causa formada á D. Felipe Salas Arriola, director de La Montaña, por injurias al rey, en vista de la falta de asistencia del procesado, declarado en rebeldía por el juzgado del Hospital.” (11)

      A raíz de esto, nuestro personaje es detenido e ingresado en la cárcel de Madrid el 20 de octubre, tal como recoge el periódico “El Motín”:

      “PALOS Y PEDRADAS

      Suma y sigue

      Denunciado El Zorrillista y La Voz de las Tabernas, en Madrid; y El Pueblo Catalán, en Barcelona, multándole además; y El Porvenir, en Cartagena; y El Anunciador, en Pontevedra, ingresando en la cárcel su director hasta prestar fianza de 5.000 pesetas; y Las Riberas del Eo, en Rivadeo; y La Autonomía, en Barcelona; y El Bajo Ampurdan en San Feliú de Guixols; y sentenciado á ocho años de prisión mayor el director de El Mercantil Valenciano; é ingresado en la cárcel de Madrid D. Felipe Salas Arriola, exredactor de La Montaña.” (12)

      El mismo día de su ingreso en la cárcel, se celebra un nuevo juicio contra Salas Arriola, esta vez por injurias contra los ministros en otro escrito inserto en su periódico “La Montaña”:

      “Hoy se ha visto en juicio oral y público, ante la sección segunda de la sala de lo criminal de la audiencia de Madrid, la causa seguida contra D. Felipe Salas Arriola, como director del periódico la Montaña, por la publicación de un articulo que inserto en el referido periódico con el epígrafe de <<Politica>>, se consideró como constitutivo del delito de injurias a los ministros de la Corona, y especialmente a la persona del presidente.

      El abogado fiscal Sr. Gabancho, haciendo aplicación de los artículos 582 185, en relación con el 181, 269 y 90 del Código, pidió se impusiera al Sr. Salas la pena de cuatro meses de arresto, accesorias y costas.

      La defensa del acusado, encomendada al Sr. Muñoz y Rivero, solicitó la absolución, porque, en su concepto, el articulo denunciado no es constitutivo de delito.” (13)

      También hubo colegas que desde sus periódicos se postularon a favor del alcalaíno, lamentando su situación y que los periodistas fueran tratados peor que los delincuentes comunes. Es el caso de del periódico menorquín “El Liberal”, que el 29 de octubre trata de Felipe Salas, hablando con ironía del trato recibido por parte de los conservadores:

     “Las autoridades conservadoras no se descuidan en cuanto a la persecución contra la prensa y los periodistas.

      Anteayer fue reducido a prisión y llevado a la Cárcel-Modelo donde se halla nuestro amigo don Felipe Salas Arriola, por consecuencia de una o dos denuncias con que la fiscalía favoreció al ya difunto periódico republicano federal <<La Montaña>> de que el señor Salas era en aquella época director.

     No sabemos si la <<Gaceta>> de hoy publicará algunos decretos de indultos a favor de criminales de delitos comunes; pero en cambio podemos afirmar que poco a poco las cárceles y presidios van llenándose de escritores, mientras andan sueltos los autores de horribles delitos.

      Lamentamos la desgracia que aflige a nuestro amigo y compañero y le deseamos resignación bastante para sobrellevarla y memoria para no olvidar esa distinción con que le honran los alfonsinos.” (14)

Lámina que sacó el periódico El Motin  el 21 de diciembre de 1884
denunciando la falta de libertad de prensa

      El 7 de noviembre se dicta sentencia contra Felipe Salas Arriola sobre uno de los pleitos en que estaba envuelto. Es absuelto del delito contra la forma de gobierno, mientras que es condenado a dos meses y un día de arresto por injurias al presidente del Consejo de ministros, Cánovas del Catillo, obligándole además a pagar las costas del juicio. (15)

      Es destacable la forma en que “El Motín”, periódico satírico, republicano y anticlerical, habla sobre la sentencia:

      “Felipe Salas Arriola, director de La Montaña, ha sido condenado á dos meses y un día de arresto por injurias á Cánovas. No lo entiendo; porque no le ha llamado hermoso ni hombre de Estado.” (16)

      Nuestro paisano no cumplirá su condena puesto que consigue salir de la cárcel tras pagar una fianza. Pero aquí no terminan sus problemas judiciales, puesto que el 21 de noviembre se inicia otro juicio contra él:

      “El jueves del actual se verá en juicio oral y público en la Sala segunda de lo criminal, la causa seguida á Felipe Salas Arriola. El fiscal pide contra él diez años de presidio por supuestas amenazas graves al rey.

      Al mismo tiempo que felicitamos á nuestro amigo por verse ya fuera de la cárcel-modelo mediante fianza. Le deseamos absolución completa en la causa que se verá el 20.” (17)

    


NOTAS

(10) Edición del sábado 5 de abril de 1884 de “La República” Año I nº 56 pág. 1 

(11) Noticia publicada por “La Discusión” el miércoles 17 de septiembre de 1884 Año XIXX, n. º 1.693 pág. 2 y por la del mismo día de “La República” La República Año I nº 197 pág. 4.

(12) Edición de “El Motín” del 26 de octubre de 1884 .Año IV n. º 43 pág. 3

(13) Edición del 28 de octubre de “La Correspondencia de España. Diario universal de noticias” Año XXXV Número 9716 pág. 3 y del mismo periódico del día 29 Número 9717 pág. 2.

      “El Día” en su nº 1605 pág. 2 de 28 de octubre añade que lleva 8 días preso en la Cárcel-Modelo. Idéntica noticia se recoge en “La Época” Año XXXVI n. º 11.599 pág. 3 martes 28 de octubre de 1884 y en “La Discusión” Año XXIX n.º 1.760 pág. 2 jueves 30 de octubre de 1884.

(14) Edición del 29 de octubre de 1884 de “El liberal. Órgano democrático de la isla de Menorca”. Año 4 Número 1005 pág. 2 y 3.

(15) Edición del 7 de noviembre de 1884 de “La Correspondencia de España” Año XXXV Número 9726 pág. 2 y 3

(16) Edición del 9 de noviembre de 1884 de “El Motín” Año IV, n. º 45, página 3.

(17) Edición de “El Motín” del 16 de noviembre de 1884. Año IV n. º 46, página 3.

No hay comentarios:

Publicar un comentario