2.3 Análisis simbólico e iconográfico
Hasta ahora hemos referido en este artículo los documentos históricos relacionados con la imagen y de cómo está realizada. Pero ahora nos centraremos en la forma de representar a esta virgen, el por qué se representó sentada, por qué el Niño se dirige con su mano al espectador…Para ello consultamos los referentes iconográficos.
En algunas ocasiones hemos oído nombrarla como “Virgen del Rosario”, y en algunos documentos (20) también se le denomina “de la Consolación”. A pesar de estas denominaciones erróneas no nos cabe duda que estamos ante una Santa María de la Victoria.
Como referimos en el apartado histórico, fue una comunidad de religiosos la que fomentó y propagó el culto de la imagen venerada en su primer convento, la malagueña Virgen de la Victoria
(21).
Esta primera Virgen de la Victoria, conservada en la actualidad en el santuario del mismo nombre tiene su origen en una visión espiritual que tuvo el rey Fernando el Católico durante la conquista de la ciudad en 1487: la virgen sedente con el Niño sentado sobre su pierna le daba ánimos y esperanza para culminar la batalla. Según la tradición también le anunciaba la llegada de unos religiosos. Tras la victoria frente a los musulmanes el rey mandó construir una ermita que fue donada a la orden de San Francisco de Paula. Fue así como se fundó el primer convento de los mínimos en España. La escultura de Málaga tiene rasgos y estilos propios del siglo XV. Las esculturas que se harán posteriormente se realizarán con los gustos de cada época. La orden se fue expandiendo en Andalucía (22) . En estos nuevos conventos ubicaron a una virgen de la Victoria en sus retablos mayores o colaterales, estás esculturas son consideradas versiones de la imagen original venerada en Málaga.
El origen de iconografía de la “primera” Virgen de la Victoria responde a una forma medieval de representar la Madre con Su hijo, basada en el simbolismo de María como Trono de Dios (Theotocos). Según la época y las escuelas artísticas las dos figuras mantendrán más o menos comunicación entre sí, a veces con frialdad hierática y en otras con una conversación más humanizada.(23)
Numerosas crónicas de la época y posteriores recogen la visión espiritual del Rey Fernando el Católico: la virgen sedente con el niño sentado sobre su pierna le daba ánimos y esperanza para culminar la batalla. La madre llevaba en su mano derecha la palma de la victoria (en ocasiones sustituida por un cetro) y ambos iba coronados como rey y reina de los cielos. La virgen aconseja al rey de no abandonar el asedio y que la llegada de unos monjes al campamento sería el anuncio de la victoria.
En algunos escritos de los propios frailes se incluyeron grabados de la que consideraban su patrona. Otra fuente para conocer cómo se representó esta leyenda la encontramos en representaciones pictóricas. Un lienzo del siglo XVIII conservado en Lucena amplía la leyenda e incluye en el cielo a San Francisco de Paula, de rodillas con los brazos extendidos, implorando.
La iconografía de esta talla de Alcalá sigue por tanto el modelo que se realiza en Málaga. La Virgen, aparece como trono, mirando al frente y eso puede explicar la actitud hierática y visión frontal con la que fue tallada. Tiene la mano derecha realizada para retener un cetro, actualmente no conservado. También está coronada. El Niño sin embargo tiene actualmente unas potencias, pero igualmente pudo estar coronado ya que presenta un orificio central. Como es habitual tiene en su mano izquierda la representación del universo
(24). Con la otra mano parece darnos ánimo tal y como describía la leyenda.
Otro detalle interesante es que el retablo actual en su calle central, aparte de la Virgen entronizada reproduce al santo fundador en la actitud descrita en las fuentes (de rodillas, con rompimiento de gloria).
A pesar de estas coincidencias, la Virgen de la Victoria presenta unas peculiaridades propias que no comparte con ninguna de las vírgenes de la Victoria conservadas en la zona. El enorme manto rojo que envuelve la composición y el detalle posterior del sol como expositor (no sabemos si originario o no) son detalles no encontrados hasta ahora en ninguna otra virgen de la Victoria (25).
3. Proceso de Restauración
Como comentamos en la introducción, a mediados de 2011 gracias al impulso del Director Gral. de la Fundación Forja XXI D. Juan José Ruiz Márquez y en colaboración con los párrocos de Alcalá (Rvdo. P. Marco A. Huelga y Rvdo. P. Francisco Jesús Núñez) se iniciaron los trabajos de restauración y conservación (26). La intervención de esta olvidada escultura se consideró muy necesaria por ambas partes, tal era el estado de deterioro en el que se encontraba y la singularidad de la imagen.
3.1 Estado de conservación
Teniendo en cuenta que la Virgen se encontraba en la iglesia al menos desde 1797, hay que considerar que la mayoría de acontecimientos que influyeron en el templo también afectaron indirectamente a la imagen. Gracias a las publicaciones sobre la cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno (vinculada también desde su creación al convento de mínimos) podemos reseñar los hechos más significativos:
- 1811: Ocupación francesa. Las tropas francesas arrasan el convento e intenta incendiarlo. Gracias a la intervención vecinal se evitan mayores destrozos. Constan que fueron quemados enseres y libros. Algunas zonas de imagen de la Victoria aparecen ahumadas, aunque esto era habitual por el uso de las velas, se localizan sobre todo en la parte posterior y los ángeles delanteros. En 1815 queda constancia en documentos de la cofradía del Nazareno que la ocupación francesa había causado destrozos en las imágenes, aunque no se especificaba en cuales “hasta el extremo de haber hecho en el citado templo y con sus imágenes, terribles catástrofes (…) los más atroces sacrilegios, robos y destrozos (27) …”
-1822-1824: los frailes abandonan temporalmente el convento
-1835: se hace el inventario de los bienes, expulsan a los frailes y se cierra la iglesia.
-1851: se cede la iglesia a la Diócesis y consta que se encontraba “ruinosa” (28)
-1864 -1865: se realizan obras en el templo. Tuvieron que ser importantes porque la Cofradía traslada sus imágenes. Hemos de suponer que la imagen de la Victoria permaneciese en su camarín.
- 1869: el obispo Félix María de Arriete prohíbe exhibir el Santísimo en el expositor de la espalda de la Virgen.
-1884: nuevamente la cofradía traslada sus imágenes y enseres por el estado ruinoso de la iglesia.
-1910: en un documento gráfico se observa que se sustituye la techumbre. Esto pudo ocasionar una oscilación térmica que dilata/contrae los ensambles de la madera.
-1911: se reinaugura el templo.
Parece claro que acontecimientos del siglo XIX afectaron a la integridad material de la Virgen de la Victoria. A esto se añade la decadencia del culto a una advocación que ya no tenía a sus frailes ni siquiera una cofradía que velara por ella. Las dimensiones de la imagen dificultaban también su eventual traslado.
Sea como fuere en 2011 encontramos la Virgen de la Victoria en un estado de conservación muy preocupante. Presentaba grandes lagunas ya desprendidas de policromía, ensambles abiertos (algunos de más de 5 mm), pérdidas de madera en los pies de ángeles, en los dedos de la Virgen y el Niño…Una capa de polvo y suciedad acumulada hacía que se viera apagada y además facilitaba la degradación de sus materiales.
Afortunadamente el Niño Jesús debido a su colocación más elevada se ha conservado en mejores condiciones. Los estofados de su túnica se encontraban intactos. Sin embargo la madera de los pies se había desprendido y fue repuesto con un material poco utilizado en las esculturas, pero habitual en la zona como es el corcho (29).
Lamentablemente los ángeles por estar más sobresalientes y en la zona más baja son los que más han sufrido daños (amputaciones de manos, pies, restos de cera, humos de velas…). Los que están en la cara del sol se encuentran mucho peor porque están más próximos al muro y sobre ellos se han depositado numerosos residuos.
A pesar de todo, el olvido o el culto secundario que ha tenido la Virgen de la Victoria ha contribuido a la escasez de repintes ya que no se ha tenido la necesidad de “renovar” su aspecto. Los repintes más significativos se encuentran en los rayos del sol; al presentar numerosas faltas se optó en algún momento por repintar con purpurina.
Algunos detalles constructivos del retablo y su camarín tampoco han contribuido a una adecuada conservación - insectos xilófagos, humedades, presencia de aves - (30). El retablo, que como hemos visto data de 1797, se encuentra también muy afectado por ataques de varios tipos de insectos, entre ellos se observan ataques antiguos termitas.
Hasta la fecha han concluido los principales procesos de restauración en el Niño y los procesos en la Virgen in situ han avanzado bastante. Para finalizar será necesario actuar en la otra cara de la escultura (sol manifestador) y resolver la inestabilidad de la virgen junto a las peanas (se apoya con unos simples calzos de madera). Las peanas tienen en su interior un vástago de madera que se introduce en el propio suelo del camarín (hecho de obra). Se ha podido constatar que tiene un ataque de xilófagos y se encuentra parcialmente deshecho. A esto se añade el mal estado del retablo; es por eso que para una mejor conservación de la obra será necesario trasladarla del camarín y evitar su deterioro.
No dudamos que próximamente podremos contemplar una de las obras artísticas más singulares de la zona. La restauración de esta imagen permitirá restablecer su doble función: como imagen devocional y como elemento litúrgico, mostrándonos esa cara oculta que no vemos desde hace 140 años.
NOTAS
(20) En el inventario realizado en 1835 aparece nombrada como “Ntra Sra de Consolación”, AHPC. Sección Hacienda/Desamortización/Inventarios Bienes 1235, leg.1-2.
(21) Hay algunas imágenes denominadas también de la Victoria en referencia a la acción de gracias. Pero el tipo más difundido es que el que difundieron los frailes mínimos, como es el caso de la imagen alcalaína.
(22) (Pomar, 2006, pág. 271) recoge en su artículo que se fundaron hasta diez conventos en la actual provincia de Cádiz (Jerez, El Puerto, Sanlúcar, Medina, Jimena...)
(23) (Romero, 2006, pág. 216)
(24) La corona actual es de baja calidad. Se encuentra repintada con purpurina oro, ero una cata ha permitido observar que conserva restos de plata. Una de las potencias del Niño era de hojalata, pero se localizó la original que faltaba entre los pliegues de la Virgen, gracias a la atenta mirada de J.A Lobato Ruiz y J.A. Almagro Lobón.
(25) Se han estudiado profundamente las vírgenes de la Victoria de Málaga y Sevilla. Al ser más antiguas que la virgen de Alcalá, no guardan similitud en cuanto a estilo. Se conservan varias en la zona (Sanlúcar, Medina) sin ninguna similitud con la de Alcalá puesto que fueron modificadas o se hicieron otras nuevas de candelero.
(27) Desde 2007 y mediante diferentes proyectos (taller de empleo, planes memta) esta Fundación ha promovido la conservación de imágenes emblemáticas de Alcalá (San Jorge, San Cristóbal, Niño Jesús del Santuario…). La mayor parte de estas restauraciones se realizaron en 2009. Tras el año 2010 dedicado a esculturas de la comarca de la Janda, en 2011 el Director Gral. Juan José Ruiz Márquez impulsó de nuevo la conservación de bienes culturales en Alcalá con la restauración de esta emblemática talla.
(28) (Almagro & Almagro, 2006, pág. 33)
(29) (Almagro I. , 1997, pág. 108)
(30) En la zona del talón izquierdo del Niño se encontró pegado a la madera un fragmento de corcho siguiendo la forma faltante que reconstruía esa zona.
(31) Agrademos a Francisco Medinilla su inestimable contribución para solucionar este problema.
No hay comentarios:
Publicar un comentario