sábado, 20 de febrero de 2021

IES Pedro Sainz de Andino: II Parte



Artículo publicado en la Revista de Apuntes Históricos y de Nuestro Patrimonio 2018

Jaime GUERRA MARTÍNEZ 



      Iniciado el funcionamiento del Colegio Libre Adoptado Sainz de Andino en octubre de 1968 en el local de la OJE y posteriormente en el Centro Cultural -hoy Escuela de Adultos en la Calle Lepanto-, inaugurado el edificio dedicado al Colegio en junio de 1969, los cursos 1969/70 y 70/71 se desarrollaron con normalidad. Dos licenciadas (doña Elena Toscano y doña Carmen Mera) y un grupo de maestros/as desarrollaron el proceso educativo de Bachillerato Elemental. Los estudiantes pagaban sus cuotas, los profesores impartían sus clases y el Instituto Isla Verde de Algeciras realizaba los exámenes de junio y septiembre. 

     Las dificultades no eran pocas, los recursos eran escasos, pero la ilusión del profesorado, la voluntad del Ayuntamiento, el interés de los padres y el esfuerzo educativo del alumnado impulsaban un proyecto de formación en Alcalá, que abría un horizonte de futuro a los niños y niñas de nuestro pueblo. 

     Los problemas eran muchos. Las cuotas que tenían que pagar los padres, la escasez de dotaciones con las que se encontraban los profesionales de la enseñanza, las limitaciones económicas del Ayuntamiento, la escasez de licenciados dispuestos a trabajar por un sueldo escaso... ponían al borde del abismo la ilusión recién puesta en marcha. 

     El alumnado, entre los que me encontraba, vivíamos ajenos a tanta penuria educativa. Éramos felices. Teníamos nuestra clase, nuestros maestros, los libros, estudiábamos en la medida que cada cual podía o creía necesario. Éramos ajenos al esfuerzo de padres, munícipes, profesores y pueblo en general volcado en un proyecto ilusionante pero frágil. Pero el CLA era un lastre económico para el Ayuntamiento y una carga económica grande para los padres. 

     Afortunadamente el grupo de profesores encabezados por doña Elena Toscano Sánchez y los concejales creían en el futuro que el Instituto representaba para los jóvenes de nuestro pueblo. Los apoyos eran continuos. Las conversaciones en bares, locales públicos e instituciones eran permanentes. Se había hecho un gran esfuerzo. Había que seguir apostando por el futuro de los niños de Alcalá. El funcionamiento político era diferente al de hoy, pero Alcalá, difícil en sus apuestas mutuas, en este caso hizo pensamiento único en el caso de la enseñanza. 

     Afortunadamente no nos dejamos vencer por las trabas burocráticas. Había sido difícil llegar hasta la construcción del Colegio y su puesta en marcha. Ahora había que dar un paso adelante .



      LA LEY GENERAL DE EDUCACION DE 1970 impulsada por el ministro José Luis Villar Dalasi abría una puerta a nuestras aspiraciones. Esta Ley establecía la enseñanza obligatoria hasta los 14 años, cursando EGB, estructurada en dos etapas. Tras los primeros ocho años el alumnado accedía al BUP, bachillerato unificado Polivalente, o a la recién creada Formación Profesional, FP. Con esta Ley se reformó todo el sistema educativo desde preescolar a la universidad, adaptándolas a las necesidades de escolarización. Se abría un nuevo camino para el CLA SAINZ DE ANDINO. 

     Desarrollado los Decretos y Ordenes de la nueva Ley, nuestros munícipes y profesorado empezaron a valorar las posibilidades de acogerse a la enseñanza que implantaba la nueva Ley. Ello se concretó en un primer documento oficial. Así el 5 de febrero de 1972 se reúne el Consejo Local del Movimiento y toma un acuerdo que es el primer paso para la conversión de CLA en Instituto Nacional de Bachillerato y provisionalmente para la implantación provisional del Bachillerato Unificado Polivalente (BUP). El acuerdo que se eleva a la Corporación Municipal para que adoptara las correspondientes medidas para llevar a buen fin lo acordado es el siguiente: 

“...de toda clase de facilidades, realice, active y acelere con la máxima urgencia los trámites necesarios para la conversión del CLA en Instituto Nacional de Bachillerato donde se puedan impartir de forma oficial las enseñanzas del BUP…” 

     Siete días más tarde, el 13 de febrero, un grupo de padres (92 firmas) elevan un escrito al Ayuntamiento apoyando la propuesta anterior. Inmediatamente, el Ayuntamiento hace suya la propuesta y, con fecha 3 de abril, la Alcaldía eleva al Ministerio de Educación y Ciencias solicitud que el CLA pueda impartir la enseñanza de 1° de BUP en el curso 1972/73. 

     Mientras se espera la contestación del Ministerio, con fecha 7 de septiembre doña Elena Toscano, directora, eleva escrito a la Corporación para que se pueda impartir el curso de 5° de Bachillerato superior y se hagan para ello las gestiones pertinentes ante la delegación del Ministerio de Educación y ciencia. Con fecha 12 de septiembre el alcalde de Medina hace también la misma petición. Interviene en el tema don francisco Pérez Sabina, procurador en Las Cortes, Diputado Provincial y alcalde de Olvera, a quien el alcalde don Miguel Puelles Montes envía carta solicitándole ayuda con fecha 20 de septiembre de 1972. 

     El 27 de septiembre de 1972 se recibe contestación del Ministerio de Educación y Ciencia en el que se deniega al CLA impartir enseñanza de 1° curso de BUP, para el curso solicitado (1972/73) toda vez que con carácter general se implantara en el curso 1975/76. No obstante, se informa al Ayuntamiento que puede solicitar en su momento oportuno, a través de la Delegación Provincial del Ministerio en Cádiz, autorización para impartir en el centro el 5° curso de Bachillerato a extinguir, como había indicado doña Elena al Ayuntamiento. Para el que publica este artículo, y para mis compañeros del Instituto, sin saberlo, fue una oportunidad para continuar estudiando en Alcalá el 5° curso y posteriormente el 6°. Gracias a los que lo hicieron posible... 

     El 6 de noviembre de 1972 el Delegado Provincial de Educación y Ciencia manda al Ayuntamiento escrito de acuerdo con la Orden Ministerial de 19 de junio de 1971 por la que los titulares de centros no estatales, subvencionados o sustentados total o parcialmente por la Administración del Estado pueden solicitar del Ministerio se haga cargo de los mismos, a cuyo efecto se abrirá el oportuno expediente. En el escrito se informa de los documentos que deben conformar el expediente, sobre el que la Dirección General resuelve. 

     El 28 de noviembre de 1972 la Corporación en sesión plenaria aprueba la petición de transformar el CLA en Instituto de Bachillerato. El 15 de diciembre el Alcalde manda al Ministro de Educación exposición de motivos y acuerdo municipal sobre la solicitud. El 9 de noviembre doña Elena Toscano comunica al Sr. Alcalde escrito del Delegado Provincial en el que se solicita planos del edifico y número de alumnos. 

     El Ayuntamiento solicita a los colegios Juan Armario, SAFA y Beaterio el número de alumnos que asisten en 4°, 5° y 6° de Educación Primaria. Contestan los colegios Juan Armario y Beaterio. 


CURSOS              
JUAN ARMARIO
BEATERIO

72
76
36
32
33
61







   
    
       Por Orden Ministerial de 9 de septiembre de 1974 se autoriza provisionalmente impartir durante el curso 74/75 las enseñanzas de Bachillerato Superior (cursos 5° y 6°) de ciencias y letras, con el obligado cumplimiento de la Orden Ministerial de 10 de junio de 1972 y de 1 de abril de 1974. El Ayuntamiento envía informe completo sobre las instalaciones y profesorado del Colegio, así como superficie disponible para instalaciones deportivas y salón de actos en orden a la transformación del CLA en Instituto de Bachillerato. 

     Esta autorización permitía que el alumnado de las dos primeras promociones pudiera terminar el bachillerato sin tener que abandonar el pueblo, lo que para muchos hubiese sido un problema económico difícil de superar. 

       El curso 74/75 ha sido el que menor número de alumnos ha tenido el Instituto. Setenta y seis alumnos terminaron el curso, repartidos en 3°, 4°, 5° y 6° de Bachillerato. 

      Sin embargo en el año 1975 iban a llegar buenas noticias. El 26 de abril el Ayuntamiento recibe escrito del delegado Provincial en el que se comunica “el propósito de la Delegación de que el curso próximo, 75/76, se impartan las enseñanzas de Bachillerato Homologado, con posibilidad de que los alumnos realicen los exámenes en el propio centro ante tribunales del mismo colegio”. Toda una buena noticia para el Ayuntamiento, profesorado, alumnado, padres y madres. Para acogerse a la nueva normativa, el Ayuntamiento tendría que llevar a cabo diversas obras de mejoras del colegio, como laboratorio, etc. 

      Verificadas las obras de adaptación se dotaría del profesorado y del material necesario a cargo del Ministerio para que en el próximo curso puedan impartirse en el centro las enseñanzas del nuevo bachillerato. Además, añade el Delegado que la petición de crear un instituto en nuestro pueblo ha sido elevada con informe favorable a la Dirección General de Ordenación educativa. Mientras tanto la transformación del CLA en un centro de Bachillerato Homologado representaba una sensible mejora respecto a la situación escolar. 

La Corporación, reunida el 9 de mayo de 1975 acuerda: 

1.- Manifestar el agradecimiento al Delegado Provincial. 

2.- Designar una comisión, que bajo la presidencia de la Alcaldía, integrada por los señores concejales Jaime Cordero, Eladio Garzón y José Gómez, se trasladen a la Delegación Provincial haciéndole partícipe del reconocimiento de esta Corporación y localidad y a sus vez informarse de los trámites a seguir para que sea una realidad en el próximo curso las Enseñanzas de Bachillerato Homologado. 

3.- Facultar al alcalde-presidente para que lleve a cabo las obras necesarias que se indican. 

      El 13 de junio de 1975, a la vista del expediente instruido por el Ilustrísimo Ayuntamiento, la Dirección General del Ministerio de Educación, a través del Delegado Provincial comunica que “ha resuelto otorgar la calificación provisional como CENTRO HOMOLOGADO DE BACHILLERATO al centro de Alcalá de los Gazules, con una capacidad para los 315 puestos escolares”. 

     El 24 de junio de 1975 la dirección General manda otra carta al Ayuntamiento indicándole que ha considerado que en el próximo curso 75/76 se implante las enseñanzas de BACHILLER UNIFICADO POLIVALENTE (BUP). Asimismo, informa que el Ministerio asumirá los licenciados necesarios y el Ayuntamiento pondría las instalaciones necesarias en las que debía de incluirse como prioritario un laboratorio de ciencias y biblioteca. Es condición que el número de alumnos no podrá ser inferior a 25 por grupo. Se ruega a la corporación indique si acepta la implantación del BUP. 

      Tanta felicidad no podía durar mucho tiempo. Así, el 28 de noviembre tras la visita que el Inspector de educación realiza al centro, eleva informe desfavorable para que el Sainz de Andino ostente la clasificación provisional de centro no estatal “homologado” que le fue dado condicionalmente para el curso 75/76, ya que el centro adolece de las siguientes deficiencias: 

-No tiene laboratorio de ciencias naturales, ni la correspondiente dotación del mismo (el futuro laboratorio está en obras) 

-No tiene biblioteca ni fondos bibliográficos. 

      Se abre además otra dura la batalla, la del profesorado. A pesar del compromiso del Ministerio de asumir los licenciados necesarios, sólo concede el cupo de dos, totalmente insuficientes y, en consecuencia, el resto del profesorado tiene que correr a cargo del Ayuntamiento. Al mismo tiempo, con fecha 25 de noviembre se advierte que las cuotas a pagar por el alumnado para el BUP no están fijadas todavía y, en consecuencia, los precios establecidos en los centros serán provisionales. Todo ello con el curso empezado y los profesores nombrados. El Ayuntamiento muestra su sorpresa por la reducción del profesorado, pero muestra su determinación en escrito al Delegado Provincial, don José Crespo Redondo (9 de diciembre de 1975) de seguir adelante, pues “no podemos privar a la gente joven de tan inmejorable beneficio, que es el único que a la totalidad de los 72 alumnos y alumnas en esta fecha y previsiblemente un mayor número en próximos cursos, podemos ofrecerles”. 

     Evidentemente, el Alcalde no hace sino poner en valor el párrafo tercero de la comunicación del Delegado Provincial de 26 de abril de 1975 que textualmente dice: “...verificadas las obras de adaptación, se dotará de profesores y de material necesario a cargo del Ministerio,.”. Seguramente el Ayuntamiento de Alcalá pensó que a los demás centros se les iba a conceder cuatro licenciados, al nuestro le ocurriría lo mismo y no fue así. 

     En el curso 74/75 había en la provincia de Cádiz ocho Colegios Libres Adoptados: 

Jimena, 41 alumnos/as 
Los Barrios, 77 
Tarifa, 77 
Olvera, 41 
Alcalá de los Gazules, 72 
Medina Sidonia, 54 
Ubrique, 52 
Villamartín, 51 

      Desconozco los criterios del Ministerio para la asignación de profesorado. Quiero creer que los había. Lo que sí es cierto es que por alumnos y grupos no podría haber grandes diferencias con Alcalá en el que se impartía 1° BUP y 5° y 6° de Bachillerato (curso 75/76). 

      Las cosas vuelven a ponerse tensas con la Administración Provincial y el Ministerio. Dirige su mirada el Alcalde al Gobernador Civil y Jefe Provincial del Movimiento, don Antolín de Santiago y Juares (14 de enero de 1976). En ella le cuenta “que en noviembre de 1975 el Delegado del Ministerio de Educación, Sr Troncoso, en una reunión en el Gobierno Civil nos dijo a los alcaldes que el profesorado sería proporcionado por el Estado y solo nos han mandado dos profesores. Ante esto mostré mi desacuerdo al Delegado Provincial. Igualmente te comunico que el laboratorio está prácticamente terminado y que no es exacto que no existe personal administrativo. Hay un profesor que recibe una gratificación por hacer esas funciones. Falta dotación de laboratorio y material didáctico, que en la comunicación de 26 de abril de 1975 el Delegado nos indicó que corrían a cargo del Ministerio. El Ayuntamiento no obstante ha adquirido ya el material que ha podido. Se despide el alcalde reiterándole su ayuda”. 

      Las gestiones del Gobernador no dan resultado y con fecha 23 de febrero de 1976 se comunica al Ayuntamiento que no va a recibir ni profesores ni material. 

     Sin embargo, algo comenzó a moverse. El 9 de marzo, el Delegado don José Crespo comunica que comprende la sorpresa que centros como Olvera, Medina, Ubrique y Villamartín tengan más licenciados que Alcalá, que tiene más alumnos, pero en la Delegación no hay ningún escrito que establezca los mismos términos para el Sainz de Andino. El Sr. Crespo aconseja al Alcalde que solicite, igual que hicieron los otros centros ante la Dirección General de Ordenación Educativa, incrementar la dotación de profesorado para el próximo curso. En los mismos términos se manifiesta el Sr. Antolín, quien el 6 de abril comunica que ha visitado al Subdirector General de Autorizaciones y Conciertos de Ordenación Educativa y le ha garantizado que, casi con total seguridad, para el próximo, curso Alcalá podría contar con cuatro licenciados, siempre que el Delegado Provincial informe favorablemente. La Corporación toma el acuerdo de hacer la solicitud, enviándose copia al Gobernador Civil y al Vicesecretario del Ministerio don Manuel Puelles Benítez, para que se interesen por la petición. En septiembre de 1976 no había nada resuelto, por lo que empieza a revoletear la idea de que para mantener el profesorado habrá que aumentar la cuota y así lo manifiesta el Alcalde, don Manuel Romero Mejías, al Gobernador Civil. 

     En octubre un grupo de más de doscientos padres y madres elevan un escrito al Gobernador pidiendo justicia. Como dato positivo de toda esta lucha fue la creación de la PRIMERA ASOCIACIÓN DE PADRES (APA), a la que el Ayuntamiento dio el visto bueno en noviembre de 1977 y el gobierno Civil la aprobó el 9 de diciembre de ese mismo año.



1 comentario:

  1. Buen artículo, me ha llevado a mis 14/15 años año 1979 que fue cuando comencé 1BUP, gracias por darnos a conocer un poquito la historia de nuestro pueblo y este caso particular.

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